miércoles, 5 de febrero de 2014

Butterflies

Cuando empiezas a conocer a alguien que te gusta todo es nuevo, todo es risas, todo es emocionante. Cuando pasa el tiempo, esa magia no se pierde, si se hacen las cosas bien. Las mariposas se posan y se transforman en serenidad. Esa serenidad que te da seguridad, paz y fuerza para seguir adelante, para ser creativo, para arriesgar. Esa suave y crocante y dulce y picante serenidad que tiene momentos tiernos y momentos llenos de pasión y deseo, pero también de lucha, de rabia y de tristezas. De errores y perdones. De caídas y recuperaciones. De paciencia y de consideración.

Hay quienes prefieren seguir cazando mariposas toda la vida. Yo en cambio sé que las mariposas que un día atrapé, siguen conmigo. Solo se transformaron en la serenidad del amor de verdad.

No hay comentarios: